la de los jueves 25 mayo 2006

Como se los he comentado creo en Dios y soy católico por que mis padres me llevaron a que un “faldillon”me mojara la cabeza con agua y me untaran aceite por aquí y por allá. Sin embargo no soy “borrego” que cierra los ojos a lo que sucede en mi entorno, por eso hoy tocare de manera breve (eso creo) el caso Marcial Maciel Degollado.
A finales de la semana pasada los medios se concentraron en la noticia donde el Vaticano separa al padre Maciel de ejercer en publico (no me meto en términos canónicos, para que no haya “borlote”); claro esta que cuando se ventila la noticia salieron un sinnúmero de declaraciones a favor y en contra de lo sucedido. Ahora bien en lo personal solo tengo que decir dos cosas, la primera es que el padre Maciel fundo una organización que es sólida, muy fuerte y con un enorme poder económico; y este logro mis queridas lectoras y estimados lectores (digo a ellas las quiero, y a ustedes pues los estimo mucho), es muestra inequívoca de que el señor es un excelente líder. La segunda, es que este desenlace es solo la “crónica de una muerte anunciada” (¡Gracias Maestro García Márquez!), el padre Maciel ya traía “equipaje en la cajuela” y solo era cuestión de tiempo para que le dieran el golpe final, y este se dio inevitable como la muerte o el pago de impuestos (para los que los pagamos); y es que el señor es humano y como ser humano (además con mucho poder) pues la tentación de la carne es canija y pues cedió (no lo digo yo, lo confirmo el vaticano, por mas crudo y vulgar que les parezca). Mientras estuvo vivo el buen Karol Wojtyla protegió a su amigo como pudo, al punto de “invitarlo” a dejar la legión por el bien de la organización misma, no contábamos que “Papa Panzer” ya lo traía en la mira y “pum” los “panzers” no fallaban (pregúntenle a Patton o a Montgomery), al final le “trono” como se dice en el “argot” del cardumen.
¿Se hizo justicia? No lo se, pero si puedo decir que por desgracia existen muchísimos casos de abusos a menores por parte de sacerdotes católicos, y eso no lo podemos ocultar, y el abuso a menores por parte de quien sea es un hecho que debe ser castigado con todo el rigor de la ley.
Dejemos a Maciel a un lado (pero siguiendo en temas religiosos), ¿Qué onda con el Código Da Vinci?; ¡Que buen relajito se armo!. Sinceramente creo que la Iglesia se debería callar el “pico” en cuanto a desacreditar novelas y películas se refiere, la verdad solo provocan que se incremente el morbo de los cinéfilos y aumente la venta de libros. La polémica fue mayor cuando se estreno la película “La ultima tentación de Cristo”(1988), basada en la novela del mismo nombre (publicada en 1952) de Nikos Kazantzakis (Autor Griego 1883 – 1957), esta novela fue prohibida por el Vaticano en 1954 y la Iglesia Ortodoxa Griega incluso excomulgo al autor, casi Premio Novel de Literatura (en 1957 lo perdió por un voto contra Albert Camus). Bueno el punto es que la Iglesia se salió con la suya y la película fue prohibida en varios países de esta aldea global, y novelas que hablan de temas religiosos hay muchas de entre mis maltratadas neuronas puedo recordar en este momento “Operación Jesucristo” (Og Mandino), “El Caballo de Troya” (J.J. Benítez); “Medico de cuerpos y Almas”, “El gran león de Dios”, “Yo Judas” (Taylor Caldwell); en fin hay tantas y tantas novelas de este tipo, que quizás por su temática, no arman tanto relajo como “El código Da Vinci”. Señores Feudales de la Iglesia, en lugar de andar prohibiendo cosas, deberían de preocuparse por educar a la “raza” para que al tener un mayor conocimiento, tengan un criterio mas amplio y sepan distinguir lo ficticio de una novela a los hechos reales que puedan llegar a escribirse o a escenificarse en una película, aunque quizás lo que quiere la Iglesia es seguir teniendo un pueblo ignorante mucho mas fácil de manipular ¿Ustedes que piensan?
Pasando a temas mucho mas cómicos (que Dios quiera no se vuelvan tragedia después del 2 de julio), es ridículo ver como siguen las cosas en la carrera electorera, del panorama nacional ni hablar, siguen las desacreditaciones en lugar de las propuestas sólidas y convincentes. Acá por el lado del rancho, es también chistoso ver por ejemplo a un Amaro Rosas que seguramente hizo su berrinche cuando se nombre candidato (hoy “respetable” Diputado) a un muy limitado Leocadio Hernández y el quedo fuera; bueno tanto se “enmohino” que ahora anda de perredista, ¿Qué tal el pollo? Pues no que muy del PRI mi querido “Profe”.
De nuevo solo puedo decir que este es el ejemplo clásico de que muchos políticos, simplemente están en busca del poder dejando a un lado lo que significa ser un servidor publico y representante del pueblo; sin olvidar también que nosotros tenemos mucha culpa al no exigirle a nuestros servidores (por que están para eso, para servir a nosotros, aunque siempre parece que es al revés), que se pongan a trabajar. Somos nosotros los culpables al aplaudir que hagan esta o aquella obra publica, sin ponernos a pensar que lo único que hicieron fue cumplir con su obligación y que no fue ninguna gracia o logro monumental.
Si tomamos los temas que hoy escribo, los metemos a una licuadora y le agregamos poquito picante, algo de ácido y mucho lodo; pareciera que tanto a la Iglesia y a los políticos les agrada tener a un cardumen ignorante y fácil de manejar.
Quizá solo yo lo veo así, o quizá no.


Que tengan ustedes buen día y mejores noches