la de los jueves 2 julio 2009

Yo no entiendo esta “nueva y moderna moral”, de verdad no la entiendo. Hay circunstancias y conceptos con los que puedo llegar a ser tolerante y sin desgarrarme las vestiduras, pero hay otras cosas que, en definitiva, me hacen pensar en lo mal que andamos.

Lo anterior quiero ilustrarlo de una manera que no a todos dejará feliz, pero sean tan amables de acompañarme y ya criticarán mis tarugadas después. Utilizaré para esta reflexión una comparación: Maciel vs. Jackson.

Marcial Maciel fue hasta su muerte un creyente; su obra habla mucho de lo que este hombre nos dio al mundo (hombre, sí, más humano de lo que a nosotros nos hubiera gustado pensar y más humano de lo que a él hubiera gustado confesar). Sabemos que la Congregación de Los Legionarios de Cristo es una obra mundial, monumental, y eso nada más como "probadita", porque podemos también mencionar el Centro de Estudios Superiores de la Legión de Cristo, el movimiento de apostolado Regnum Christi, la red de colegios y universidades, centros de formación, entre otras cosas que impulsó e hizo, pues no lo dejó en el tintero para un mejor momento, fue hombre de acción y eso todos en su momento se lo reconocieron. Pues bien, cuando Maciel falleció, lo que menos se mencionó fue su obra, los medios se ensañaron reseñando únicamente sus terribles fallas como ser humano (unas comprobadas y otras no). Su obra de beneficio a la humanidad perdió importancia ante la opinión pública. Primero los medios se encargaron de decirnos sobre cuántos niños (de aquel entonces) supuestamente abusó de manera sexual el Padre Maciel, pero luego fue la Iglesia misma la que nos dijo que Maciel tuvo una mujer y una hija (bajo el nuevo papado de Ratzinger, ya que el papa santo optó por obviar los pecados de su buen amigo), como si eso fuera en realidad lo verdaderamente pecaminoso. Fue su pederastia comprobada y no sus tratos con mujer lo que lastimó seriamente sus buenas intenciones. Pero no hay que olvidar: no sólo nos dejó buenas intenciones, como la mayoría de los políticos en México. Dejó obras monumentales que perdurarán con un legado de beneficio tangible para todos nosotros. Eso sí, a los medios amarillos se les “olvidó” mencionar las cosas buenas que Maciel hizo en el nombre de Dios, e insisto, que fueron muchas y a nivel Urbi et Orbi. Por último, menciono que fue Juan Pablo II (el buen Karol) quien reconoció en Maciel algo muy especial al nombrarlo consultor y miembro de asambleas y concilios. Pues bien, este fue el Padre Maciel. Pasemos a Jackson.

Michael Jackson, la figura del espectáculo, nos regaló el famoso paso de baile “moonwalk” y nos vendió a buen precio sus álbumes “Thriller” y "Bad", y también otros, pero de menos vuelo. En lo humanitario, este “filántropo”, dicen, se desprendió de más de 300 millones de dólares en donaciones. Fundó movimientos y organizaciones benéficas. Y si copiamos los datos que nos proporciona “wikipedia”, termino rapidito esta “la de los jueves”, pero no se trata de eso, voy al punto: a Jackson también se le acusó de abuso a menores y pagó muchos millones de dólares para no ir a parar a la cárcel, y, por otro lado, todos pudimos ser testigos de cómo este "cuate" pasó de ser un artista de claros rasgos afro-americanos, a un andrógeno de raza no definida, pero con rasgos parecidos a los de Irma Serrano, Alfredo Palacios, del “doctor” del Villar y Lucía Méndez (que va pa’llá que vuela), tan raro quedó que hasta nos hacía pensar en la famosa frase de Don Pedro Ferriz; ¡Un mundo nos vigila!

Los medios hoy “lloran” la “enorme” pérdida de una figura como la de “Máicol”. Nos hacen ver “lo verdaderamente grande y significativo" que fue este artista para el mundo (ese submundo gringo de la moda, gadgets y otras banalidades), pero sospechosamente son estos mismos medios los que hoy "olvidan" el circo mediático de las desviaciones sexuales de este “grandioso” andrógeno. Algo me dice que su música seguirá generando dinero, y mucho, por eso conviene rescatarlo como músico que fue.

Estoy seguro que ustedes mis lectoras y lectores, tienen más detalles de estos dos personajes, yo sólo hice unos breves comentarios para ilustrar el ejemplo, así que, permítanme concluir:

1. Maciel hizo obras a nivel mundial, que hoy perduran y que no murieron con él.
2. Jackson hizo obras a nivel nacional y unas pocas a nivel mundial, que esperemos duren mientras haya dinero y que no mueran con él.
3. Maciel fue acusado de pederasta y de fallar en sus votos sacerdotales.
4. Jackson fue acusado de perversión y pederasta.
5. A Jackson se le llora hoy su muerte, recordando lo “bueno” que hizo y se nos olvida lo “enfermito” y “rarito” que fue.
6. A Maciel se le lapidó e hizo pedazos, y se nos olvidó la importancia y grandeza de su obra.

Por lo anterior creo que estamos mal, bastante mal. Algo está sucediendo con los valores actuales de nuestra sociedad que buscamos dinero en un basurero y nadie tiene paciencia con nuestra pequeña existencia que llora. ¿Cómo es que llegamos a esto?, ¿Quién o qué se equivocó hace cuánto para que hoy se nos olvide la totémica labor de un pederasta en pro de la ciencia, educación y la labor social, al mismo tiempo que "perdonamos" al otro pederasta por haber sido cantante de pop…? Por favor, por más bueno que haya sido, por más bonito que bailara, por más "cool" que resultasen sus excentricidades… ¿verdad que no hay congruencia? Y seguimos esperando a que “alguien” inicie un cambio que nos permita alcanzar mejores niveles de dignidad y progreso, pero dime tú, amigo lector, lectora, si crees que alguien está moviendo un dedo en ese sentido. Creo que voy a cambiar primero yo y luego intentaré volver a escribir de nuevo sobre este asunto tan escabroso.

Es jueves, traten de sobrevivir dignamente y pasen una tarde sabrosa. Un abrazo, nos leemos la próxima semana.

Que tengan ustedes buen día y mejores noches.